Claro, yo me he preguntado más de una vez si podría llevar a cabo esa tarea sin llamar a un profesional y, la verdad, sí se puede. No es que sea una misión sencilla, pero con un poco de paciencia y las herramientas adecuadas, pulir una encimera de granito en casa es factible. Al fin y al cabo, estas encimeras son extremadamente duraderas y pueden resistir el desgaste si se les da el mantenimiento correcto. ¿Sabías que un buen pulido puede prolongar la vida útil de tu encimera hasta en un 30%? Eso no es poca cosa.
Para empezar, es crucial tener una lijadora eléctrica. Yo compré una por 60 euros que tiene varias configuraciones de velocidad. Elegí una con ajustes variables porque así puedo controlar la intensidad del pulido. Las lijadoras eléctricas son especialmente útiles para superficies grandes y planas, como las encimeras de granito. Otro aliado indispensable son las almohadillas de diamante; estas vienen en diferentes niveles de grano, desde 50 hasta 3000. Cada número representa la finura del grano y, por experiencia, te recomiendo comenzar con un grano más bajo e ir subiendo.
Una vez que tienes todas las herramientas, el primer paso es limpiar bien la superficie. Yo uso un limpiador de granito que compré por 12 euros. Es importante eliminar cualquier rastro de comida, grasa o polvo porque afectan el resultado final. En cuanto terminé de limpiar, empecé a lijar con una almohadilla de grano 50. La clave aquí es mantener la lijadora en movimiento constante para evitar desbastar demasiado en un solo área.
El proceso de lijado se realiza en varias etapas, cambiando de grano a medida que se va avanzando. La primera vez que lo hice, dediqué unas tres horas solo a esta fase inicial. Subí del grano 50 al 100, luego al 200, al 400 y así sucesivamente hasta llegar al 3000. Entre cada cambio de almohadilla, es recomendable limpiar el polvo generado; yo usé un trapo húmedo para eso.
La siguiente fase crucial es el pulido. Aquí es donde la encimera realmente empieza a brillar. Yo usé un compuesto pulidor que me costó alrededor de 20 euros. Aplicarlo es sencillo, solo necesitas una almohadilla para pulir y una buena cantidad de compuesto. El truco está en trabajar en secciones pequeñas, haciéndolo en círculos para obtener un brillo uniforme. Me tomó unas dos horas cubrir toda la encimera.
Después de pulir, es recomendable sellar la superficie para proteger el granito de manchas futuras. Un buen sellador puede costar entre 30 y 50 euros pero dura meses. Aplicar el sellador es fácil, yo usé un aplicador de esponja y lo dejé secar según las instrucciones del fabricante, usualmente unas 24 horas.
¿Qué resultados obtuve? Pues mi encimera parecía otra. A ver, no es que sea comparable a un pulido profesional que podría costar en torno a 300 euros, pero considerando que gasté menos de 150 euros entre herramientas y materiales, siento que me salió bastante bien la jugada. Incluso me atrevería a decir que, con un poco de práctica, podría conseguir un acabado casi perfecto la próxima vez.
Si te estás preguntando si realmente vale la pena pulir una encimera de granito en casa, la respuesta depende de lo que valores tu tiempo y el presupuesto que tengas. Yo, por ejemplo, considero la experiencia y el ahorro significativos. Sin olvidar la satisfacción de haber realizado el trabajo con mis propias manos. Además, cada vez que la miro y veo ese brillo reluciente, me siento bastante orgulloso.
Ah, y un consejo final: investiga bien las técnicas y productos antes de empezar. Yo encontré mucha información útil en foros y vídeos en línea. Solo toma precauciones y no apures los tiempos de secado ni los procesos, la paciencia es tu mejor aliada en esta tarea. Si te sientes confiado y cuidadoso, estoy seguro de que puedes hacerlo bien. Y si aún no te sientes preparado, siempre puedes adquirir una encimera granito nueva y disfrutar de ese brillo espectacular desde el principio.